Durante mi paseo por el parque de la ciudad la Cartuja, me encontré con tres características de las cuatro estaciones. Había brotes de ramas que estaban brotando. No es algo que se encuentre al final del verano, sino más bien en la primavera. También había algunas flores y el sol seguía brillando. Pero también había señales de que el otoño estaba en camino. Quizá tenga más que ver con el verano, pero las hojas ya estaban cayendo. Debido al cambio climático, los árboles se quedan calvos antes, no por morir antes del invierno, sino por la sequedad del verano.

Además de los objetos de arte secular del parque, también estan las estatuas de San José y Nuestra Señora. Es bastante triste ver a San José viviendo en un barrio bajo. No creo que sufra mucho por la sequía, pero un poco de aislamiento podría ayudarle a pagar las facturas para mantener a su familia.

María en la entrada del parque siempre está tipificada por las rejas hechas para ella con un gran candado. Hoy al recordar el santo nombre de María he pensado en lo triste que es su encarcelamiento. Una partida de Monopolio está descartada para ella.

¿Quizás también interesante para ti?