Madrugar para encontrarse con Jesús
Dos días seguidos al río
Llevo dos días seguidos yendo al río con mis amigos. Es un rato agradable, pero mi cuerpo no está acostumbrado a tanto ejercicio. Jugamos a distintos juegos con una pelota de voleibol. El segundo día, nos lanzamos frutas blandas que se mantienen a flote. Fue un rato muy divertido, pero tanto ejercicio me ha dejado muchos dolores musculares.